Bueno, aquí estamos en la que es la primera entrada de 2014 y llevo desde finales del año pasado dedicarle una a este juegazo. Vamos, prácticamente desde que me lo pasé. ¿El por qué? Porque para mí es el mejor juego de la generación pasada, y para mí, el mejor rpg de corte japones que he jugado hasta la fecha. Yo no soy el único que opina esto, gran parte de la crítica especializada ya lo catalogó como el mejor rpg de la generación en cuanto salió al mercado y no solo esto, sino que la gran mayoría de los jugadores que han terminado el título suelen afirmar que puede ser el mejor rpg de la última década, algo que bajo mi punta de vista no es muy difícil.
Pero primero, vamos a hablar de donde viene este juego. El estudio creador de esta obra es Monolith Soft, empresa fundada en 1999 y cuenta con su haber juegos como la serie de títulos de Xenosaga, Baten Kaitos, el impresionante y desconocido Disaster: Day of Crisis o el mas reciente Project X Zone pero a partir de la compra por parte de Nintendo hará ya unos años dió sus frutos en forma de co-operaciones en juegos de la talla de Super Smash Bros: Brawl, Zelda: Skyward Sword, Animal Crossing: New Leaf, Pikmin 3 o Zelda: A Link Between Worlds. Realmente es innegable que cierto peso tiene este estudio pero ¿De donde venían? Pues mayoritariamente de esa fuga de genios que experimento Square Co, que comúnmente se conoció como Squaresoft antes de su fusión con Enix, ya que la mayor parte de Monolith fueron ex empleados de Squaresoft y para ser mas concretos este grupo fueron los creadores de juegos como Xenogears o el último que hicieron bajo Square, Chrono Cross. Tras este curriculum creo que es imnegable la calidad que atesora este estudio, independientemente de que te gusten sus juegos o no.
Ahora quiero entrar a hablar sobre el juego, tarea muy difícil para algo de esta envergadura, de hecho yo solo me voy a centrar en mis impresiones como jugador, no voy a criticar este juego, le vendría grande a cualquiera, por lo que mi recomendación es, si puedes, juégalo. Simplemente, no leas analisis, de hecho, ¡Joder! ¡Cabronazos! ¡Dejad de leer esta mierda y salid a compradlo, no teneis dinero... da igual, robadlo y comprad esta puta obra maestra y dejad de mariconear por ahí hostia puta!.
En fin, dicho esto solo puedo decir que nadie me ha pagado por decir esto. Pero es que el juego lo merece.
Este juego lo que realmente le hace único son dos grande factores, el primero de ellos, la historia. Y si, no me tiemblan los dedos al escribir que este juego tiene la mejor historia que he disfrutado delante de unos mandos, pero es que es mi sensación. Soy fan de muchas sagas y muchos juegos, pero es que este juego está a un escalón por encima. Te das cuenta de ello cuando juegas a un juego, o lees un libro, o ves una película que conforme la trama va evolucionando crees que a cada paso que da la historia va a terminar pero siempre hay algún giro inesperado que hace que el espectáculo continúe durante mucho tiempo, y en este caso, durante horas y horas, sin perder en ningún momento el ritmo.
La historia comienza en un prólogo donde ves a dos titanes inmensos, Bionis y Mekonis luchando a muerte en medio de la nada que simboliza algo así como la pelea eterna entre el bien y el mal, hasta que los dos se hieren mortalmente a la vez. Con el paso de las eras en cada titan muerto florece la vida, en uno la vida esta basada en la mecánica y en el otro la vida es orgánica, como cabría de esperar. Pues bien, ahora esa lucha se traslada a un nuevo terreno, ahora no son los titanes en sí, sino que son esas pequeñas especies las que están en guerra. Una guerra tan antigua como la vida misma. El caso es que te ponen en situación, y te ponen a manos de un chaval que vive en un poblado de Bionis. Hasta que los Mekhonis atacan tu aldea, matan a mucha gente y entre ellos a una amiga de la infancia. Este chaval, junto a otro amigo (eran 3 amiguitos) juran venganza y se embarcan en una aventura donde su fin es matar a Metal Face, digamos que es como el cabecilla del escuadrón que ataco la ciudad. Pues bien, esto que os he contado no es ni el 10% de la aventura. Ya que lo que te dan a entender es que en una guerra tan larga y tan aparentemente absurda no hay ni buenos ni malos, ni vencedores ni vencidos. Solo quiero señalar que en algunos puntos del juego no sabes si lo que estas haciendo es lo correcto o por lo contrario el villano de la historia eres tu. Hasta que llegas casi al final de la historia donde ya comienzas a comprenderlo. La historia de este juego es valiente a la par que compleja, critican mucho al comportamiento humano en su peores facetas, al comportamiento de las altas esferas de la sociedad, que te la presentan sin escrúpulos hacia sus subordinados y sobre todo ese gran contenido de crítica voraz hacia las religiones, podemos decir que no deja títere con cabeza sobretodo al sentimiento religioso y ese comportamiento tan humano de jugar a ser dioses y de poseerlo todo, desde personas, objetos, animales e incluso a la naturaleza que le rodea. La historia da para pensar y no cae en ningún momento a los típicos clichés baratos de quincieñeras, de hecho aquí no hay romances hormonados y simples. Aquí hay un mundo hostil donde constantemente muere gente, donde si que cabe el amor y los buenos sentimientos pero no es un escaparate grotesco para venderte el producto y comercializarlo.
La situación en la que se vive en este mundo (o mundos) contrasta con los grandes y bellos paisajes que podremos disfrutar durante la travesía, grandes praderas verdes, inmensas selvas llenas de vegetacion, montañas nevadas, pantanos fangosos y nublados. Y todo lleno de vida, de seres a veces graciosos y a veces hostiles, con cambios climáticos y atmosféricos. Es impresionante ver el paso del día a la noche y viceversa. Una autentica gozada. Y esta era la segunda gran baza del juego, el inmenso mapa por recorrer lleno de vida, de hecho creo que puede ser el juego mas grande que haya jugado nunca. Realmente impresionante. Como dato curioso, los creadores del juego afirmaron en una entrevista de "Iwata Ask" que normalmente cuando alguien se dispone a crear un rpg lo primero que crean es el argumento, pero ellos decidieron crear el mundo y después la historia que transcurriría sobre el. Yo sinceramente no se si creérmelo pero sea lo que sea lo que hayan hecho realmente lo clavaron.
Quizás el aspecto que empañe al juego es su sistema de combate, que no deja indiferente a nadie, o lo amas o lo odias, no hay termino medio. Lo que si puedo decir después de dedicarle al juego mas de 110 horas es que el sistema funciona. No pudo ser de otra manera. Es intuitivo y no te cansa en ningún momento. No es el típico sistema por turnos donde farmeas pulsando infinitamente un botón hasta que todos los enemigos mueren, ni tampoco son esos controles típicos de los mmorpgs donde pareces que no estas haciendo nada. Aquí tu tienes el control de lo verdaderamente importante mientras que los ataques básicos son automáticos. Parece una aberración, pero es que es lo mas acertado, ya que no solo tienes que controlar a tu personaje, usar las habilidades correctas, posicionarlo bien, usar bien el pequeño kick time event con la b para subir la moral al grupo y hacer ataques encadenados, sino que también tienes que posicionar a tu grupo bien en cada momento mediante ordenes y combinaciones de botones mientras pulsa la L o la R, no me acuerdo. Y esto es importante ya que el nivel de dificultad del juego, para ser un rpg, es bien alto.
Y por último, viene un aspecto muy importante, la banda sonora. Que es magistral, no hay tema que suene y digas... vaya coñazo, las hay de toda índole y estilos, e incluso una vocal a modo de despedida al juego. Cuando pisas Mekonis por primera vez, ves como los temas son mas electrónicos pero igualmente buenos que las piezas musicales de Bionis, gran mérito. Realmente es otro apartado que brilla con luz propia.
Resumiendo, gran historia, gran viaje y gran juego. Desde que me lo pasé paso a formar parte de mi grupo de juegos favoritos, de hecho son de ese tipo de juegos que no quieres que acaben nunca y cuando llegas te quedas como triste, triste por dos razones, una de ellas es porque ha acabado y la otra razón es porque probablemente esa experiencia no se vuelva a repetir nunca.
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